En marzo, la inflación al consumidor anualizada se desaceleró a 21,3% desde 24,9% en febrero. El Banco Nacional dice que la disminución de la inflación está relacionada con una importante oferta de alimentos y combustibles, una mejor situación en el sector energético, una mejora en las expectativas de inflación y una situación favorable en el mercado de divisas al contado.
Aunque, la NBU agregó que la tendencia también se explica por el efecto de la base de comparación del año pasado. En marzo, el aumento de precios de los productos alimenticios procesados se desaceleró significativamente (a 23,5% a/a), y la tasa de crecimiento de los precios de los productos alimenticios crudos disminuyó a 31,6% a/a. El crecimiento de los precios de los productos no alimentarios también se desaceleró significativamente (18,8% a/a). La tasa de crecimiento del costo de los servicios se mantuvo casi sin cambios (15,4% a/a). La tasa de aumento del precio del combustible se desaceleró significativamente hasta el 27,9% a/a.