En la mañana del 1 de septiembre, como resultado de más disparos de mortero de las tropas rusas en la central nuclear de Zaporizhzhya, la protección de emergencia se disparó y la quinta unidad de energía, que había estado operando, se apagó, informó Energoatom. Además, los ocupantes dañaron la línea de alimentación de 330 kV ZAES para sus propias necesidades. En el modo de transición, la unidad de potencia No.2 se desenergizó (no estaba funcionando) con el arranque de los generadores diesel. Energoatom enfatizó que en los últimos 10 días, esta es la segunda vez que las acciones criminales de Rusia han llevado al cierre de la unidad y la desenergización de la estación. Ayer, el Director General del OIEA, Rafael Grossi, con su equipo, visitó la central nuclear de Zaporizhzhia. Después de inspeccionar la planta, la mayoría de los miembros de la delegación abandonaron la estación. Sin embargo, cinco representantes de la misión del OIEA se quedaron en la ZNPP, descargaron los equipos que trajeron y seguirán trabajando en la planta.