Los apagones masivos se han convertido en una prueba importante para todos los sectores empresariales. Hasta el momento, las empresas no se han visto obligadas a cerrar, pero algunas ya están considerando la posibilidad de suspender la producción, dijo la directora de la Asociación Empresarial Europea, Anna Derevyanko. Según el director, si la situación es crítica, estas empresas tendrán que parar la producción al menos durante varios meses hasta que la situación mejore. Derevyanko señaló que una de las grandes cadenas minoristas calculó que un día de cierre de tiendas le cuesta 10 millones de UAH. ”Las tiendas tienen generadores, pero estos apagones constantes aún afectan significativamente sus operaciones”, dijo el director de la EBA.