En el último año de producción, Astarta procesó 2,7 millones de toneladas de remolacha azucarera, cultivada tanto de forma independiente como por socios agrícolas, y produjo 377.000 toneladas de azúcar en sus cinco fábricas de azúcar. La temporada de procesamiento de 2023 fue la mejor, en términos de volumen de materias primas procesadas y azúcar producida, de los últimos cinco años.
Sin embargo, durante los primeros nueve meses de 2023, el beneficio neto de la empresa disminuyó un 9,8% hasta 55,97 millones de euros, a pesar de un aumento de las ventas del 14,8% hasta 392 millones de euros. El beneficio bruto de la compañía aumentó un 3% hasta 151,9 millones de euros, mientras que el resultado operativo disminuyó un 15,9% hasta 79,91 millones de euros y el EBITDA disminuyó un 10,8% hasta 116,63 millones de euros.
La razón de las pérdidas fueron los períodos de cosecha más prolongados, causados por varios factores: condiciones climáticas difíciles (lluvias intensas y prolongadas en octubre-noviembre de 2023 que provocaron el aplazamiento de la cosecha y dificultades logísticas en la entrega de materias primas a las empresas procesadoras, y las consiguientes interrupciones en el suministros a algunas fábricas de azúcar y una disminución de su productividad.