Según un informe del Consejo del Defensor del Pueblo Empresarial, representantes de empresas ucranianas y extranjeras en países como Polonia, Alemania, Canadá, Reino Unido, Suecia, Francia y Bulgaria indican que más del 60% de las empresas de estos países están dispuestas a invertir hasta 5 millones de dólares en Ucrania, mientras que más del 30% contempla inversiones de hasta 100 millones de dólares.
Sin embargo, la principal barrera para la inversión siguen siendo los riesgos relacionados con la guerra, según declaró el 69% de los encuestados. Además, el 38,9% de las empresas citaron la inestabilidad económica, las fluctuaciones en el tipo de cambio de la moneda nacional y la inflación como factores disuasorios adicionales. En cuanto a los desafíos legales y regulatorios, los inversores suelen señalar los complejos procesos de permisos, el acceso limitado a la justicia, la falta de mecanismos de seguro contra riesgos políticos y los problemas relacionados con la corrupción y las amenazas militares.
Según el Defensor del Pueblo Empresarial, Roman Vashchuk, la estabilidad de las empresas ucranianas ha demostrado a los inversores que vale la pena invertir. Sin embargo, sin reglas estables, protección jurídica y transparencia, ningún instrumento de inversión será eficaz.